26 septiembre 2006

Interrogantes

¿Qué haces cuando vienes de la oficina de correos a mediodía y al doblar una esquina te das de bruces con el protagonista de tu posible novela? Pues te llevas un sobresalto secreto y, secretamente, lamentas no poder formular las preguntas esenciales, a saber:

¿Cuántas veces has dejado impresa la huella de tu mano en la nieve?
¿Te inquietan los nervios del mármol?
¿Tus lágrimas tienen memoria?
¿Sonríes en alguna fotografía borrosa?
¿Para qué es pronto todavía?
¿Te refugiarás en página par o impar?
¿Cuántas palabras necesitaré para decirte quién eres?

Y mientras tanto cruzas la calle.


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6 Comments:

Blogger Miguel Cane said...

¡Ah, pero eso es la creación, joven Mariano!

Las preguntas...

a ver: (Yo sé que no son para mí, pero es un defecto que tengo: siempre contesto a toda encuesta, aún si ajena)

¿Cuántas veces has dejado impresa la huella de tu mano en la nieve?

Una. Cuando niño y salimos corriendo a ver la nieve. Era lejos de casa.

¿Te inquietan los nervios del mármol?

Me inquietan muchas cosas. Soñadas y no.

¿Tus lágrimas tienen memoria?

Sí. Y sabor.

¿Sonríes en alguna fotografía borrosa?

Debe haber alguna, pero si sonrío, no sólo es borrosa, también debe ser muy rara. Mis sonrisas son tímidas a la lente.

¿Para qué es pronto todavía?

Para muchas cosas... mas nunca tarde, espero.

¿Te refugiarás en página par o impar?

Par.

¿Cuántas palabras necesitaré para decirte quién eres?

No lo sé. El que tiene la respuesta a eso serías tú.

Perdona la intromisión habitual, pero ya me conoces.

Muchos abrazos hasta el norte.
La semana siete camina...

M

7:37 a. m.  
Blogger emejota said...

Mi defecto es justamente el contrario: las encuestas me estresan muchísimo porque o no sé qué contestar en ese momento o porque podría contestar varias cosas (y diferentes) a la misma cuestión.

Pero lo intentaré:

¿Cuántas veces has dejado impresa la huella de tu mano en la nieve?

Pues no sé (ves?)

¿Te inquietan los nervios del mármol?

Esta sí que me la sé. Muchísimo. Esos relámpagos dibujados en la superficie del mármol me ponen un poco nervioso.

¿Tus lágrimas tienen memoria?

Pues no me acuerdo.
Y algunas.
Bueno, pon que sí.
(soy un caso para las encuestas)

¿Sonríes en alguna fotografía borrosa?

Casi nunca salgo en las fotos. O salgo en las fotos pero estoy al otro lado. No sé si al otro lado se sale borroso. Miraré a ver.

¿Para qué es pronto todavía?

Para contestar a esa pregunta, por ejemplo.

¿Te refugiarás en página par o impar?

Yo me refugio entre paréntesis.

(así)

¿Cuántas palabras necesitaré para decirte quién eres?

Según el día.

Abrazos.

12:06 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

"formular las preguntas esenciales: ¿Cuántas veces has dejado impresa la huella de tu mano en la nieve?
¿Te inquietan los nervios del mármol?"

Me encanta! :)

Besos.

1:37 p. m.  
Blogger EVA said...

PARA TUS PREGUNTAS MIS RESPUESTAS
Nunca deje mis huellas en la nieve, la nieve es efimera, desparecera, nadie sabra que fui yo..
Me inquieta su frialdad, su estar ahi con el paso de los años, su quietud para con nosotros...
La lagrimas siempre tienen memoria y a veces vuelves a llorar las mismas lagrimas por las mismas razones...Ellas siempre se acuerdad de porque lloras...
Siempre intento sonreir, pero mi sonrisa es triste, triste como yo con mi interior, como mi vida...
es pronto todavia para morir, siempre es pronto para morir, siempre hay algo que hacer y a quien llamar antes de morir...
yo me refugio siempre en las paginas impares para que mi vida nunca este cuadrada perfectamente, hay es donde se refugian los inconformistas aunque yo no lo sea
Solo deberas usar mi nombre para saber quien soy y cuando tu boca diga mi nombre yo volvere la cara para mirarte y sonreirte con mi triste sonrisa

3:06 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Ahora sabemos nosotros que fuiste tú la de las huellas en la nieve. ;)

No dejes de sonreír Eva, aunque ahora sea triste esa sonrisa. No dejes de sonreír, vale ?

Un abrazo.

V.

9:31 p. m.  
Blogger emejota said...

Hola Eva: a veces pienso que yo estoy dejando mis huellas en la nieve blanca de la pantalla. Y este blog también es efímero, y algún día desaparecerá (o desaparecéré yo antes) y llegará el tiempo en que nadie sepa que fuí yo quien lo escribió.

(y reconozco que esa idea -Idea del Norte- ejerce sobre mí cierto efecto seductor)

Sigue el consejo de V.

Un abrazo.

2:25 a. m.  

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