24 octubre 2006

Rafael

Mi amigo Rafael cumple hoy 71 años pero a veces pienso que es más joven que yo porque conserva intacta la capacidad de asombro ante las cosas. Todas las cosas. Y eso le mantiene joven de espíritu que, al fin y al cabo, es lo que cuenta. Rafael es poeta, articulista, pintor, pirograbador, compositor y contrapuntista, habla con fluidez el latín y el griego clásico, y se levanta al amanecer para estudiar con los prismáticos el vuelo de los bencejos, que siempre dudo si son bencejos o vencejos porque yo no tengo prismáticos y desde aquí no los veo bien. También es médico. Durante muchos años ejerció la medicina en pequeñas poblaciones perdidas entre valles sin más ayuda que su estetoscopio, unos pocos antibióticos y toda la humanidad que cabe en él, que es mucha y cura. Lo sé bien.

El otro día volvimos a coincidir a la salida del funeral de la tía Carmen y nos fundimos en un abrazo. Fuimos caminando y hablando y primero le acompañé hasta su casa y luego me acompañó a la mía, y así todo el rato; hablamos y caminamos mucho porque Rafael y yo compartimos entusiasmos comunes. Se acordaba del día que le señalé que en el amanecer del "Daphnis y Chloe" de Ravel hay en realidad otros dos amaneceres escondidos y dijo que todavía se emociona. Yo me acordé del día que en un concierto la gente se volvió a mirarle y él se quedó un poco perplejo y entonces cayó en la cuenta de que la obra que acababa de sonar era suya pero no se acordaba que lo era y le dio apuro (el aplauso, el olvido le dio mucha risa).

Una vez su hijo le puso ante los mandos del ordenador para enseñarle a enviar correos electrónicos, toda una hazaña para quien te hipnotiza cuando te habla de la noche en la obra de Virgilio pero se desconcierta ante el misterio de un enchufe en la pared. Como demostración práctica me envió un mail y como Rafael es muy clásico puso los acentos donde había que ponerlos y, claro, Internet que no entiende de acentos le devolvió el mail con un mensaje que decía "Usuario desconocido" y él se sorprendió muchísimo y le dijo a la pantalla que cómo era posible que pusiera desconocido si él me conocía a mí de sobra y sabía dónde vivía y todo. Su hijo suspiró resignado.



Rafael y yo somos cómplices en la búsqueda y degustación de acordes de séptima y novena, y en la herida luminosa que producen por dentro los retardos en polifonía. Durante años compartimos página en un periódico; él con su columna "Delirios y Desconciertos" y yo con "La Idea del Norte", para variar. La página era la número 33 y eso nos hacía gracia porque el colmo de una página que tiene de inquilinos a un médico y a un paciente es que sea la número 33: diga 33.

También somos cómplices en Bach y en Mompou. Hace años, antes de partir para el hospital para que me operaran de las manos me pasé por su casa para dejarle en el buzón una grabación casera con un trocito de música de Mompou. Por si acaso. Cuando volví me encontré en el mío una carta de Rafael que contenía un poema y el poema contenía un verso que decía: "Las manos también sirven para que se nos vaya el alma por ellas".

Felicidades, Rafael.


8 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Vaya Mariano, la verdad es que tienes una cuadrilla de amigos super especiales y super auténticos.
Cada día te superas y escribes mejor, un día de estos escribiré cosas ilegibles al leerte porque muchas veces se me nubla la vista(no sé, se me pone como una película de agua en los ojos.........., me ), jajaja
Un abrazo muy fuerte

8:01 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

FELICIDADES RAFAEL :D


(71?¿?¿? no puede ser)

Un abrazo para una gran persona

8:44 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Vencejo, no bencejo, querido emejota...

Gracias por tu post, hoy como todos los días.

11:45 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Querido Mariano:

Pues si tú me lo permites, me sumo a tus congratulaciones.

No hay cosa comparable con la experiencia que uno adquiere de amigos mayores. Son invaluables.

Un abrazo,

MC

7:08 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Eres un chico afortunado porque sabes sacar lo mejor de todos los que te rodean.
Un beso

10:59 p. m.  
Blogger El cuenta cosas said...

Felicidades para Rafael!

Te sigo leyendo :)

Un abrazo

3:49 p. m.  
Blogger emejota said...

Ya estoy aqui (el bueno de Rafael estaba en la foto con el gesto ya rígido de no moverlo!)

Apartado de recados: Eram, te debo una llamada, no me olvido (días de ajetreo). Un abrazo fuerte.
Crishu: re-bienvenida. ¿A qué pensabas que me había olvidado otra vez? Pues mira, sí, para qué te voy a engañar. Pero tengo lo tuyo desde hace tiempo eh? Si me escribes por mail y me das una dirección sale para allá.

Oye, y que es al revés: no soy afortunado porque saco de los demás lo mejor; en todo caso, soy afortunado porque los demás me enriquecen por dentro. Un beso/abrazo.

Asunto Rafael:
Muskarias y Raquel, no sé por qué os sorprendéis de la edad si la vuestra no anda lejos! Cómo disimulan! :D

(Un abrazo)

Miguel: sí, Rafael es una de mis referencias vitales. Invaluable, estoy de acuerdo. Me estoy acordando de una anécdota que a Rafael le da mucha risa: una vez alguien tuvo que presentar en público a un señor muy importante y el presentador estaba tan nervioso por la admiración que no se le ocurrió decir otra cosa que lo siguiente: "Les presento a un ser impresentable".

Un abrazo.

Vencejo, vencejo (a ver si se me queda para el año que viene) Gracias y un abrazo, cossini.

A mi me pasa al revés, Marta. Yo escribo cosas ilegibles cuando no se me pone una película de agua... Pero ya te habrás dado cuenta de que yo funciono al revés ;)

Un abrazo!

1:23 a. m.  
Blogger Daniel Naranjo said...

He querido dejar este comentario donde pertenece, por allá por el 17 de mayo. He querido enseñarte las manos como debe ser, pero la distancia no ayuda y, para colmos, la opción de comentarios del 17 de mayo tampoco... Así que me he pasado unos minutos pensando en donde poner este link sin que quede mal puesto... Y esot es lo mejor que he encontrado, porque esa frase de las manos y el alma, también se ha vuelto mía.

Aquí te muestro mis manos, mj...

http://danielnaranjo.blogspot.com/2006/10/djame-tocarte.html

un abrazo
daniel

2:39 p. m.  

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