30 octubre 2005

Hora

Hoy, a las 3, los relojes volverán a marcar las 2 y todo lo que hayas vivido en esos 60 minutos desaparecerá sin dejar rastro. No hay que dejar pasar un momento tan especial, el único instante en el que el tiempo te da una segunda oportunidad. Si a las dos y veinte metes la pata aún te quedará una hora para arreglar el embrollo de manera que cuando vuelvan a ser las dos y veinte no habrá pasado nada y podremos respirar tranquilos.

Yo no comprendo cómo un acontecimiento semejante no merece una atención por parte de la gente más allá de realizar de manera mecánica el rito de ajustar las manecillas de sus relojes, o quejarse porque mañana oscurecerá pronto o alegrarse porque tanto si decides irte de fiesta o irte a dormir, te sale una hora gratis. Desde que descubrí las posibilidades de esa hora mágica siempre he procurado vivirla de manera especial. La primera vez que me atreví a decirle a alguien "te quiero", por ejemplo. Lo hice con la esperanza de que si no era correspondido, el reloj volvería a dar la hora y no habría sucedido nada y quizá así evitaría darme un disgusto, que soy muy sensible y, para colmo, pesimista. Y si era correspondido tendría la posibilidad única de volver a vivir ese instante maravilloso.

Pronto darán las dos. Hagas lo que hagas a partir de entonces no cuenta. Te podrá quedar un recuerdo inolvidable, una cicatriz profunda, un trago amargo o la indiferencia de una hora perdida. No servirá de nada: el reloj volverá a darte por una vez una nueva oportunidad, tú verás si la aprovechas, porque sólo lo que hagas a partir de entonces quedará como lo realmente vivido y todo lo demás quedará flotando en algún lugar de la consciencia como si hubiera sido un sueño.


7 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Anoche te leí a las tres más o menos, porque no sé qué le pasó a mi blog que me duplicaba los párrafos de un cuento ya de por sí bastante largo, y si no es por ti no me doy cuenta del cambio de hora. Tu post me recordó esa viejísima canción (que conste que NO es de mi época) de 'Reloj no marques las horas'. La verdad, yo lo que dices lo veo poco 'útil', porque si a esas horas le dices a alguien 'Te quiero' ¿Qué te va a decir? Casi seguro, 'Mira, nene, ya déjame dormir porfa'... (?) Qué poco romántica amanecí. Un apapacho y un beso, emejota.

10:40 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Mariano,tu que tienes influencias,¿cabria la posibilidad de retrasar las manecillas 100 o 200 horas?
Marisa de baja, la jefa de viaje de trabajo y el menda con informativos,magazine y deportivo(Estoy empezando a coger complejo de hombre orquesta radiófonico).
Senti no poder ir a tu jura de bandera en el AC,espero que lo comprendas, pero hasta mis oidos ha llegado que fue todo un éxito y que esta sonando muy seriamente tu nombre para un remake de "Oficial y caballero"en detrimento de Richard Gere.
Por cierto,ya me prestaras el uniforme, ya que como en su dia fui declarado inútil para la defensa del estado español,me hace cierta ilusión desfilar por la avenida zaragoza el próximo dia del pilar.
Que curioso,Nunca me imaginè que me dieran tantas ganas de besar en la boca a aquel sargento chusquero que tenia el atrevimiento de espetarme a la cara: " el ejercito español no necesita de ningúna manera a españolitos con sobrepeso y pies planos"( Por lo que pude comprender rápidamente que Franco en su dia ,tenia enchufe dentro del tribunal médico).
(vamos a dejarlo en este punto antes de que acabe hablando de la gripe aviar o yo que se...)
Un abrazo-

7:41 p. m.  
Blogger emejota said...

Pues sí que te has levantado poco romántica, chica.

Tienes que tener en cuenta que siempre se cambia la hora en sábado, y las 3 de la mañana de un sábado no son las 3 de la mañana de un martes... vamos, que no es una hora muy intempestiva...

Un saludo

9:33 p. m.  
Blogger emejota said...

Mi querido Javier: ya me gustaría a mí tener influencias con el reloj, pero a tanto no llego. Sin embargo, no se agobie y, aunque usted puede con todo, llámeme a eso de las 11 y algo haremos "en el aire", que para eso están los amigos. Lo pensaré esta noche que ahora salgo de cena.

Un saludo

9:36 p. m.  
Blogger Magda Díaz Morales said...

Cuanta razón tienes, Mariano, no había reparado en ello. Si es una hora perdida, a la vez es ganada, ganada si de reparar algo se trata, pero no existe...

Acá también cambiamos las manecillas del reloj, así que hoy te lei más temprano ¿ no te lei? si fue en la hora perdida...

Un beso.

11:39 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Que buen post el del día de hoy. Siempre había unicamente pensado en la hora de más para dormir, o para seguir la fiesta y aún así llegar a buena hora a casa.
Me gusto mucho la observación. Te mando un abrazo. fflaquis.

11:43 p. m.  
Blogger emejota said...

Magda y fflaquis: pues ya que habéis reparado en ello, os sugiero que lo tengáis en cuenta para el próximo año para darle a esa única segunda oportunidad que nos da el tiempo el valor que se merece.

Un abrazo.

1:45 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home